Trump sí intenta hundir a Canadá para apoderarse de él de manera hostil, revela NYT

07/03/2025 - 12:00 pm

The New York Times relata cómo Justin Trudeau pasó de pensar que Donald Trump estaba bromeando cuando se refirió a él como ‘Gobernador’ y a Canadá como ‘el estado número 51’ a principios de diciembre a declarar públicamente que su aliado y vecino más cercano estaba implementando una estrategia de aplastar al país para apoderarse de él.

Ciudad de México, 7 de marzo (SinEmbargo).– El “estadounidense feo” ha vuelto, escribe Gary Manson hoy en la portada de The Globe and Mail. “Y nadie encarna mejor este término que el Presidente estadounidense Donald Trump, cuya actitud torpe, arrogante y de ‘soy mejor que tú’ refleja todo lo que está mal en su país en este momento. Su discurso ante el Congreso, plagado de mentiras, el martes por la noche, evocó ese canto odioso y patriotero tan detestado en todo el mundo: ‘¡U-S-A! ¡, ¡U-S-A!, ¡U-S-A!’”.

El autor dice que cualquier persona razonable debe preguntarse: ¿qué sucederá ahora que este grupo cobarde y desenfrenado de nihilistas está al mando de Estados Unidos? “Estos cristianos actores son encarnaciones vivientes y hablantes de los siete pecados capitales”.

Gary Manson explica que el término “estadounidense feo” (cuya traducción en México sería: “gringo feo”) tiene sus raíces en una novela de 1958 del mismo nombre. En ella se narraban los lamentables esfuerzos de los funcionarios de desarrollo exterior de Estados Unidos, que operaban en el extranjero. para relacionarse con los locales. En cambio, vivían pretenciosamente, a menudo eran ruidosos y groseros, no hacían ningún intento de aprender idiomas extranjeros y, en su mayoría, se relacionaban con otros estadounidenses.

El término “estadounidense feo” acabaría encontrando un lugar en el léxico de la cultura popular, dice Manson, para describir a los estadounidenses prepotentes de rasgos poco atractivos que se describen en el libro.

El tono del texto de Mason en The Globe and Mail es el mismo tono en toda la prensa, e incluso en la clase política canadiense. Hay un rechazo al estadounidense, a sus productos y a su actitud pero, de fondo, hay un rechazo a Donald Trump y a su equipo. Y las razones son evidentes, pero se han venido profundizando conforme se revelan más datos.

Matina Stevis-Gridneff, periodista de The New York Times en Toronto, revela hoy que después de que el Presidente Trump impusiera aranceles a Canadá el martes, el Primer Ministro Justin Trudeau hizo una declaración extraordinaria que en gran medida se perdió en la refriega del momento:

“La excusa que está dando hoy para estos aranceles al fentanilo es completamente falsa, completamente injustificada, completamente falsa”, dijo Trudeau a los medios de comunicación en Ottawa. “Lo que quiere es ver un colapso total de la economía canadiense, porque eso hará que sea más fácil anexarnos”, agregó.

“Esta es la historia de cómo Trudeau pasó de pensar que Trump estaba bromeando cuando se refirió a él como ‘Gobernador’ y a Canadá como ‘el estado número 51’ a principios de diciembre a declarar públicamente que el aliado y vecino más cercano de Canadá estaba implementando una estrategia de aplastar al país para apoderarse de él”, expuso Stevis-Gridneff.

The New York Times dice que luego de que Trump impusiera aranceles a Canadá el martes, Trudeau hizo una declaración en ese mismo sentido: “Lo que quiere es ver un colapso total de la economía canadiense, porque eso hará que sea más fácil anexarnos”.

El Times da detalles en exclusiva de las dos llamadas que Trump y Trudeau sostuvieron el 3 de febrero, una por la mañana y otra por la tarde, como parte de las discusiones para evitar los aranceles a las exportaciones canadienses.

“Los detalles de las conversaciones entre los dos líderes y las discusiones posteriores entre altos funcionarios estadounidenses y canadienses no se habían publicado con todo detalle hasta ahora, y fueron compartidos con The New York Times bajo condición de anonimato por cuatro personas con conocimiento de primera mano de su contenido. No quisieron que se las identificara públicamente porque estaban discutiendo un tema delicado”, expone el diario.

En esas llamadas, por ejemplo, Trump puso sobre la mesa una larga lista de quejas que tenía sobre la relación comercial entre los dos países, incluido el sector lácteo protegido de Canadá, la dificultad que enfrentan los bancos estadounidenses para hacer negocios en Canadá y los impuestos al consumo canadienses que Trump considera injustos porque encarecen los productos estadounidenses.

También le dijo a Trudeau que no creía que el tratado que demarca la frontera entre los dos países fuera válido y que quiere revisar el límite. No ofreció más explicaciones. “El tratado fronterizo al que se refirió Trump se estableció en 1908 y finalizó la frontera internacional entre Canadá, entonces un dominio británico, y los Estados Unidos”.

Trump también mencionó la revisión del uso compartido de lagos y ríos entre las dos naciones, que está regulado por una serie de tratados, un tema sobre el que ha expresado interés en el pasado.

El periódico canadiense The Star informó que Trump mencionó el tratado fronterizo de 1908 en la llamada de principios de febrero y otros detalles de la conversación. Y el Financial Times informó que en la Casa Blanca se están llevando a cabo conversaciones sobre la posibilidad de retirar a Canadá de una alianza crucial de inteligencia entre cinco países, y atribuyó esas conversaciones a un asesor de alto rango de Trump.

The New York Times refiere que las persistentes referencias en las redes sociales a Canadá como el estado número 51 y a Trudeau como su Gobernador ya tienen irritados tanto al gobierno canadiense como a la comunidad internacional.

“Si bien los comentarios de Trump podrían ser fanfarronería o una táctica de negociación para presionar a Canadá a que haga concesiones en materia de comercio o seguridad fronteriza, la parte canadiense ya no cree que sea así”, dice el Times. “Y la comprensión de que la administración Trump estaba analizando la relación de manera más atenta y agresiva, una mirada que coincidía con esas amenazas de anexión, se hizo evidente durante las llamadas posteriores entre los principales funcionarios de Trump y sus homólogos canadienses”.

Una de las llamadas a las que se refiere se dio entre el Secretario de Comercio Howard Lutnick y el ministro de Finanzas de Canadá, Dominic LeBlanc.

“Lutnick llamó a LeBlanc después de que los líderes hablaron el 3 de febrero y emitió un mensaje devastador, según varias personas familiarizadas con la llamada: Trump, dijo, se había dado cuenta de que la relación entre Estados Unidos y Canadá estaba regida por una serie de acuerdos y tratados que eran fáciles de abandonar”, revela el Times.

Lutnick de acuerdo con este reporte señala que Trump estaba interesado en hacer precisamente eso: “Quería expulsar a Canadá de un grupo de intercambio de inteligencia conocido como los Cinco Ojos que también incluye a Gran Bretaña, Australia y Nueva Zelanda”.

Además, refiere el Times, “quería romper los acuerdos y convenciones de los Grandes Lagos entre las dos naciones que establecen cómo comparten y administran los lagos Superior, Michigan, Huron, Erie y Ontario”.

“Y también está revisando la cooperación militar entre los dos países, en particular el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte”.

Redacción/SinEmbargo

Redacción/SinEmbargo

Lo dice el reportero