La población en riesgo de ser reclutada o utilizada por grupos delincuenciales para actividades ilícitas podría ser de hasta 250 mil niñas, niños y adolescentes en el país, plantea la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
Ciudad de México, 12 de noviembre (SinEmbargo).– En Michoacán, una entidad con promedio de escolaridad hasta la secundaria, el reclutamiento de niños, niñas y adolescentes se realiza tanto por cárteles del narcotráfico como por grupos de autodefensa mediante enganches de supuestos rápidos ingresos económicos, poder y fama, principalmente por parte de familiares o personas conocidas, lo que complica la denuncia, de acuerdo con una investigación de organizaciones civiles que abarca de 2018 a inicios de 2025.
En el caso particular de Michoacán, plantea el investigador Juan Carlos Quirarte, el reclutamiento de niños y adolescentes se da por parte del crimen organizado y también por grupos de autodefensa que surgieron hace más de diez años contra la extorsión de limoneros o aguacateros y que, antes de su muerte, lideraron Hipólito Mora o el Dr. Mireles.
"No hay una cuestión voluntaria, sino forzada y esto de forzado va en la línea de que no hay paridad en el consentimiento entre una persona adolescente y los adultos que están 'invitándolos', llamémosle así, a ser parte. Y si bien las autodefensas también surgen como casi un ejercicio de supervivencia, de tratar de liberarse de ciertas opresiones, sí vimos lo controversial y lo complejo de ese tipo de reclutamiento y, obviamente también allí, con más razón y fundamento, se encontraba la proximidad de quienes invitaban a ser parte de defenderse. Y la justificación era también por cuestiones de la familia, por cuestiones de la comunidad, de apoyo y de solidaridad, a diferencia, por ejemplo, de quien reclutaba para fines delictivos", aseguró el investigador colaborador de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
Sin embargo, agregó, "sabemos que esto tiene grandes secuelas en un niño, en una persona adolescente. Su cuestión psicológica, emocional, es muy distinta a la de una persona adulta y todas las secuelas que este tipo de acciones deja".


La población en riesgo de ser reclutada o utilizada por grupos delincuenciales para actividades ilícitas podría ser de hasta 250 mil niñas, niños y adolescentes en el país, y Michoacán –con aumento de homicidios dolosos y extorsión en los últimos diez años– es uno de los estados con mayor riesgo y vulnerabilidad, plantea la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
El investigador Juan Carlos Quirarte realizó un estudio de 2018 a febrero de 2025 sobre trata y reclutamiento en municipios de Michoacán en coordinación con REDIM y el Centro de Estudios Sociales Antonio Montesinos (CAM). En entrevista, resaltó que en la etapa de la adolescencia se está expuesto a ser influenciados de maneras no positivas por la búsqueda de "sentirse alguien" y empieza un ciclo de anhelar dinero rápido, poder y fama.
"Hay como una trilogía que se va desarrollando, es un escalonamiento en el que hay una atracción económica, aspiracional, que se vende como riqueza. Puedes de pronto ser rico, tener un beneficio, un ingreso y muy rápido. Entonces, ya no hay necesidad de hacer tantos estudios, (de pasar) todo ese proceso educativo que va más allá de la preparatoria a una universidad, sale uno al mundo del trabajo y se encuentra pocas opciones, y luego la remuneración no es suficiente; eso desalienta a muchas generaciones y pretenden mejor otro tipo de alternativas y lamentablemente en muchas personas adolescentes son seducidos. Después hay un escalonamiento al poder, quiero ahora ya no solamente el ser rico –despacharme las cosas que yo quiera, tenis, cuestiones de marca– después ya es el poder, sentirme que nadie puede contra mí, miren quién soy, miren aquí con quiénes estoy, a quiénes pertenezco. Y por último, la fama. O sea, no me basta saberme poderoso, no me basta sentirme que tengo un poder adquisitivo, sino que quiero que se me reconozca como tal, que otros quieran ser como yo", explicó.

FOTO: JUAN JOSÉ ESTRADA SERAFÍN/CUARTOSCURO.COM
El fin principal del reclutamiento de las niñas y adolescentes es la explotación sexual mediante coerción emocional, y a los niños y adolescentes se les suele reclutar para actividades criminales con uso de armas, lo que puede culminar en maternidades forzadas y muertes tempranas, detectó en la investigación documental y con testimonios directos en Morelia, Uruapan y Zamora, municipios hasta donde la seguridad les permitió.
"Uno puede imaginarse que en los reclutamientos, sobre todo para fines de explotación sexual, vienen de lugares distantes, lejanos y resulta que es la gente más próxima; desde familiares, amigos, vecinos. Un 70 por ciento de la captación de niñas, niños adolescentes eran personas muy próximas. Entonces, es algo que que se vincula con relaciones afectivas, manipulación y una dependencia emocional", expuso Quirarte.
Pero, añadió, al ser reclutamiento de contacto directo con personas conocidas se crean secretismos y hay temor de compartirlo y denunciar. "No solamente es el padecimiento de estar siendo explotado, de estar siendo utilizado o sus familiares siendo los que están haciéndolos víctimas de esto, sino también de pronto (se sienten) asfixiados porque cualquier solicitud de ayuda –que puede decirse fácil desde fuera– para quien lo está viviendo es complicado porque es gente con quien tiene ciertos vínculos", planteó Quirarte.
Sobre los niños y adolescentes reclutados comentó: "La forma de engancharlos a ellos son sobretodo de una atracción económica, de un sentido de pertenencia, de que reciban mucha presión de sus pares. A muchos adolescentes la función que les exigen es reclutar a otros pares suyos y esto se da más sobre todo en los varones. Ya en su narrativa cotidiana inclusive es hasta más atractiva el que se sientan que son poderosos, que son parte de alguien, que por eso hay que tenerles miedo".

Respecto al adolescente de 17 años originario de Paracho, que la Fiscalía de Michoacán señala como presunto asesino del Alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y que fue asesinado por escoltas, la organización REDIM enfatiza:
"Las y los adolescentes que cometen delitos son, ante todo, víctimas de la violencia estructural que los utiliza como una herramienta desechable. Si cometen delitos deben enfrentar las consecuencias, pero siempre bajo esta premisa". Al exponer su identidad, como lo hizo la Fiscalía de Michoacán incluso publicando la foto de su cadáver, se revictimizó, agregó la Red.
Becas y espacios recreativos
Uno de los factores que permiten el reclutamiento con coerción y violencia en Michoacán es el rezago educativo, la deserción escolar y las pocas alternativas laborales en un estado con comunidades indígenas aisladas de tradición agrícola y ganadera como los P'urhépecha, Nahua, Mazahua, Otomí, entre otros. De hecho, comentó el investigador Juan Carlos Quirarte, el reclutamiento también puede darse en las mismas actividades de extractivismo de monocultivos de limón, berries, aguacate, si se les obliga a participar solo en esa actividad sin asistir a la escuela ni a actividades de recreación.
"Este rezago educativo que que se presenta: el promedio se pone casi llegando a los 9 años de estar en un sistema educativo, o sea, hablamos entre segundo y tercero de secundaria, el promedio. Entonces, es urgente. Se quiere reforzar, se llega con todo un paquete que ayudará muchísimo porque no es solo un tema de seguridad", expuso el investigador.
"Hay una presencia muy extensa de territorios semiurbanos, lugares rurales y también dentro de los contextos de ciudad hay una deserción educativa alta. Cuando encontramos este tipo de factores ya nos está diciendo varios detalles, ¿no? Por ejemplo, cómo hay una falta del sistema de protección, de velar para que ellos puedan estar en sus ámbitos que les corresponde, en este caso, en la escuela como un proceso al cual tienen derecho, pero por distintas cuestiones económicas, coerción, violencia, han abandonado, inclusive muchos de ellos quizás para dedicarse ya a temas laborales cuando todavía son menores de edad. Sí, justamente usted plantea algunos factores que pues digamos facilitan el reclutamiento".

Como parte del Plan de Paz y Justicia de Michoacán, el Gobierno federal extenderá programas destinados a disminuir los factores de riesgo que hacen que los jóvenes se unan a grupos criminales: 6 mil 300 millones de pesos en 2026 para más de 800 mil becas a estudiantes y 130 mil mdp a más de 1 millón 070 mil beneficiados de programas de bienestar, entre ellos, 114 mil niños y niñas, así como polos de desarrollo en Morelia, Uruapan y puerto Lázaro Cárdenas, y el desarme voluntario.
Para construir el Plan de Paz y Justicia de Michoacán se tuvieron encuentros con 923 jóvenes de los municipios de Morelia, Maravatío, Cuitzeo, Pátzcuaro, Ciudad Hidalgo y algunos de Uruapan; estudiantes, pescadores, y trabajadores de diversas áreas en un diálogo circular para escuchar sus propuestas en torno a cómo imaginan un "Mejor Michoacán". Se abrirán tequios, murales, rodadas, clubes de lectura y cine popular para mitigar el acercamiento de los jóvenes a las drogas.
"Es muy valioso el reconocer que no solamente sean (acciones) en temas de seguridad, sino en todos aquellos que fomenten el desarrollo, el crecimiento. Al menos como se ha presentado, creo que trae esa intención de incrementar, de fortalecer aquello", dijo.
Pero el gran reto es la sostenibilidad en el tiempo como el acceso a escuela, a espacios de salud, a ámbitos culturales, a desarrollos armónicos, sobre todo en estas edades.





