Antonio Lorenzo Castro, quien presentó la iniciativa, explicó que todos los días se generan 120 mil toneladas de desechos en el país, de los cuales 12 mil no se recolectan.
Ciudad de México, 10 de diciembre (SinEmbargo).- La Cámara de Diputados aprobó la noche del martes por unanimidad la Ley General de Economía Circular, con la cual se busca transformar el modelo de producción y consumo en México y así obligar a las empresas a hacerse cargo de la contaminación de sus productos.
La Ley introduce la figura de “responsabilidad extendida del productor” o REP, la cual es definida como un “medio por el cual la persona productora o importadora es responsable ambientalmente de su producto en su ciclo de vida”.
En la sesión, Antonio Lorenzo Castro, Diputado de Morena que presentó la iniciativa el 20 de noviembre junto con el coordinador de su bancada, Ricardo Monreal Ávila, explicó que todos los días se generan 120 mil toneladas de desechos en el país, de los cuales 12 mil no se recolectan.
“Quedan dispersas en calles, barrancos, ríos y suelos, la mayoría se entierra quema o se acumula en dos mil 500 sitios de disposición final, pero la mayoría de estos sitios no son instalaciones modernas, son tiraderos a cielo abierto sin controles adecuados”, expuso.
En este sentido, señaló que ocho de cada 10 materiales de producción tienen su origen “en materias primas vírgenes y solo se reciclan nueve o 10 por ciento de los residuos, cuando otros países recuperan hasta 90 por ciento”. Asimismo, dijo que la iniciativa “pone en el centro que se diseñen productos y mercancías para que duren, reparen y extender la vida útil. Esto es, la reducción del desperdicio”.
Dado lo anterior, el reciclaje de materiales no dependerá de “la buena voluntad ni de programas aislados. La responsabilidad extendida se convierte en el eje de la economía circular. Quien produce, importe y ponga los productos en el mercado asuma la responsabilidad y no se limite solo a la venta”, dijo el Diputado.
Por su parte, la Diputada del PT, Isi de la Luz, aseguró que la reforma marca “un primer y gran paso para enfrentar y, sobre todo, frenar el cambio climático", ya que esta medida busca visibilizar la problemática ambiental, promover cambios sistemáticos para dar mejores resultados ecológicos e impulsar la implementación del Sistema Nacional de Economía Circular, a fin de coordinar a los tres órdenes de Gobierno.
“También la observancia del cumplimiento de las obligaciones de las grandes industrias, porque deben hacerse responsables del manejo de los residuos y de la reparación del daño ambiental que han causado o que pueden causar. El que contamina tiene que pagar”, expresó.
